MindfreakSixx

I walked around, I sat. I got up, I stared. I spoke, I cried. But I've never got an answer. Tired of it, I sat again just to watch you come and go, smiling, laughing and chatting. And how painful it was! You knew it or you didn't care at all. One, two and three friends I saw enjoying your company as I wish I could do. But wishing wasn't enough. I thought I felt something sharp being thrust slowly and painfully on my chest, as I kept watching you smiling at others. I don't blame them, nor you, because none of you seem to notice my presence there. But now I wonder if they ever did... Or if you still remember me. You never looked back, you wi

Ya habían pasado dos días y medio desde que había entrado en aquella extensa ruta, donde lo único que veía era una larga línea de cemento que atravesaba una llanura, que, si no fuera por la pequeña hierba que allí crecía, podría pasar por un gran desierto desolado. Miró hacia el espejo retrovisor y la soledad que lo había acompañado durante el día seguía siendo igual de penetrante a esa hora, en la que el cielo rojizo anunciaba la partida del sol. Volvió a posar su vista en el frente. Un solo camión podía verse en la lejanía a través del sucio

Supongo que cuando uno recuerda a alguien que fue parte de su pasado lo hace de manera emotiva, dejando que los momentos compartidos, tristes o felices, invadan su mente. Uno tiende a centrarse en esos eventos que marcaron la relación de amistad, de pareja, de familia, y en todo aquello que hizo especial la unión que tenían con esa persona. En mi caso, cuando recuerdo a alguien lo hago primero por su nombre – algo que siempre me ha costado horrores – y luego comienzo a pensar en los hechos que nos llevaron a separarnos. “Una visión un tanto catastrófica del asunto”, diría una colega del tr

  From yesterday, the fear. Eso fue en lo primero que pensé cuando todo comenzó, si es que en algún momento tuvo comienzo. Quizás siempre fue así y mi atormentada memoria no me deja recordarlo. La realidad es que fue un sentimiento que me acompañó durante toda mi vida pero es en el instante en que mis sensaciones se vuelven reales, que mis actitudes dan un giro dramático. ¿Qué más podría esperarse? ¿Cuántas personas sobrevivirían a sus más oscuras pesadillas si éstas se aparecieran frente a sus ojos? No soy un hombre que no pueda caminar solo y nunca cre

No había tenido que soportar esas pesadillas en años. Más de una década, según recordaba. Su mente había estado tranquila desde que su futuro comenzó a verse más favorable y ya no tenía tanto tiempo libre para dedicarse a pensar en algo que no fuese trabajo o estudios. Su vida parecía prometedora. A los 24 años, Ethan se había recibido con honores en la carrera de Administración de Empresas en una de las universidades más prestigiosas del país y con reconocimiento mundial, y ese mismo año había comenzado a trabajar en una multinacional como un simple conseje

Sacrarium Un automóvil negro lo llevó a través de la ciudad en un recorrido hacia la que iba a ser su residencia por un tiempo indeterminado. Observaba por la ventana como el paisaje urbano se volvía cada vez más verde, arbolado y las casas ya no se juntaban unas con otras, sino que tenían varios kilómetros entre ellas. La mayoría eran grandes casonas, inhabitadas y ya envejecidas por el paso de los años. El conductor, un hombre joven con aspecto serio y de pocas palabras, giró hacia la derecha por un angosto camino, donde sólo cabía un coche a la vez y la única señaliza

 Primeros trabajos Hybris se miró una vez más en el espejo de su gran habitación. No cabía ninguna duda, si bien los años habían pasado, aún seguía siendo hermoso y, sobre todo, conservaba su poder intacto. Sin embargo, esas oscuras marcas debajo de sus ojos hacían que todo su semblante tomara un toque más depresivo. Y no era para menos. Su nueva tarea consistía en cuidar un grupo de revoltosos e irresponsables asesinos a sueldo, que no le llegaban ni siquiera a los talones. Por mucho que quisiera quejarse y abandonar este nuevo trabajo, sabía que estaba atad

 Meeting. Era una fría noche de invierno. Las calles estaban desiertas y mojadas por el paso de una tormenta un par de horas atrás. Sin embargo, la sombra de un hombre podía verse escondida entre los árboles que rodeaban uno de los puentes más viejos de la ciudad. Observaba casi minuciosamente y sin dar a conocer su presencia a otros dos personajes que peleaban sin importarles las consecuencias bajo aquella estructura de cemento y ladrillos. Su aguda visión le permitió reconocer claramente a uno de ellos. Precisamente, era a él a quien había salido a buscar. Haberse topado con e